Optar por software gratuito en lugar de las alternativas de pago es una excelente elección, siempre y cuando el programa elegido no tenga componentes adicionales que se encargan de llenar el disco duro y hacer más lento el ordenador.
Esto es lo que ocurre con Format Factory, la popular herramienta para cambiar el formato de un archivo multimedia a otro distinto. Su archivo de instalación también tiene la función de instalar de forma subrepticia navegadores alternativos como Opera, eliminadores de malware como Spy Hunter, entre otros programas no tan inocuos.
La solución pasa por tener mucho cuidado durante el proceso de instalación. Es decir, negar uno por uno el consentimiento para instalar cada programa sugerido por el asistente de instalación de Format Factory.
Y si desafortunadamente ocurre que se instaló alguna de las herramientas indeseadas, lo más sensato es recurrir a la herramienta de desinstalación integrada en Windows.
Por último, a fin de evitar a futuro esta clase de problemas y pérdidas de tiempo, sería prudente optar por una herramienta de conversión de archivos alternativa.
Alternativas gratuitas a Format Factory
Existen programas tan buenos como Format Factory y cuya gratuidad no está en duda. Por ejemplo, Freemake Video Converter y Handbrake.