Pausar el smart TV cuando se visualizan videos provenientes de sitios como Netflix o YouTube, por ejemplo, es una acción habitual. Incluso puede parecer inofensiva, pero dejarlo así por periodos prolongados puede provocar problemas como sobrecalentamiento, burn-in en la pantalla y consumo energético inútil. Factores que además de afectar la vida útil del artefacto generan gastos innecesarios. A continuación, un breve repaso de ellos.
Cómo afecta el sobrecalentamiento a tu smart TV
El sobrecalentamiento afecta a todos los equipos electrónicos incluyendo a los televisores inteligentes. Cuando son pausados, su sistema operativo y conectividad siguen activos en segundo plano, impidiendo que el equipo entre en reposo total y se enfríe adecuadamente. Con el tiempo, esta conducta puede causar fallos por acumulación de calor en los delicados componentes internos.
Qué es el burn-in
De otro lado, Burn-in o retención de imagen es un efecto asociado a las imágenes estáticas o congeladas durante mucho tiempo, cosa que ocurre cuando se pausan series o películas en streaming, pero que también puede aparecer con logotipos o marcadores deportivos, entre otros. En algunas pantallas, cuando los píxeles son forzados a mostrar el mismo patrón por largos períodos aparecen marcas que pueden llegar a ser permanentes, siendo más propensas a este problema, las pantallas de tipo OLED.
Por otro lado, el consumo eléctrico en un equipo que nunca se apaga atenta contra el uso racional de la energía. Y como también permanece conectado a Internet, genera un gasto de datos innecesarios si no tienes paquetes ilimitados que te respalden.
Por todo esto, los expertos recomiendan apagar completamente el smart TV cuando no se utilice por un tiempo prolongado, o en todo caso, configurar adecuadamente sus modos de ahorro de energía. Esto permitirá su correcto enfriamiento, la prevención del burn-in y el ahorro de dinero.