Se le denomina “vampiros eléctricos” a los artefactos electrodomésticos que consumen energía aun estando apagados. Este calificativo está bien otorgado pues sin ofrecer ninguna utilidad gastan energía que lo único que consigue es aumentar significativamente la factura de electricidad y afectar el medio ambiente. En este artículo, te explicaremos cuáles son los tres vampiros eléctricos más reconocidos y cómo reducir tu consumo de energía en el hogar.
Televisores
Los televisores modernos suelen estar en modo de espera o modo Stand-by cuando están apagados para poder encenderse rápidamente cuando se pulsa el botón de encendido. Sin embargo, esta acción puede aumentar sustancialmente el consumo de energía.
Según algunos estudios, un televisor en modo de espera puede consumir hasta un 10% de la energía que utiliza en condiciones normales de funcionamiento. Esto supone un gasto innecesario de electricidad que se puede evitar fácilmente. La solución más sencilla es desconectar el televisor de la toma de corriente cuando no se vaya a usar durante un tiempo prolongado. Otra opción es utilizar un enchufe inteligente que corte el suministro eléctrico al televisor con una orden hecha desde el teléfono inteligente.
Cafetera eléctrica
La cafetera eléctrica es un electrodoméstico cada vez más común en los hogares, pero su uso constante puede incrementar la factura de la electricidad. Al igual que el televisor, si la cafetera permanece enchufada para mantener caliente el café recién preparado consume en promedio alrededor de mil vatios por hora. Por ello, para ahorrar energía y así reducir los costos de electricidad en el hogar se recomienda apagarla y prenderla nuevamente cuando se le necesite.
Además, se debe tener en cuenta que algunas cafeteras tienen una función de apagado automático que se activa después de un tiempo de inactividad. Esta función puede ser útil para evitar el consumo innecesario, pero también puede provocar que la cafetera se encienda por sí sola cuando detecte una variación de tensión en la red eléctrica. Por lo tanto, lo más recomendable es desenchufar la cafetera cuando no se necesite.
Microondas
El microondas es uno de los electrodomésticos que más utilizamos en la cocina, por lo que generalmente funciona en modo de espera. Sin embargo, un uso incorrecto de este modo de funcionamiento puede aumentar significativamente el consumo de energía, concretamente, dejarlo con la puerta abierta.
Un microondas apagado pero con la puerta abierta puede llegar a consumir 25 vatios por hora, mientras que si la puerta está cerrada, el consumo se reduce a cuatro vatios por hora. Por lo tanto, es importante mantener la puerta cerrada cuando el microondas no está en uso para ahorrar energía y reducir los costos de electricidad. Otra forma de evitar el consumo de energía inútil del microondas es desconectarlo de la toma de corriente cuando no se vaya a usar. Así, se evita que el reloj y el panel de control sigan consumiendo energía innecesariamente.
Usar enchufes inteligentes para combatir a los “vampiros eleçtricos”
Estos son solo algunos ejemplos de los electrodomésticos que consumen energía apagados. Hay muchos más, como los ordenadores, las consolas de videojuegos, los cargadores de teléfonos o los dispositivos de audio y vídeo.
Para identificarlos, puedes fijarte si tienen algún indicador luminoso o sonoro que muestre que están en modo de espera. También puedes optar por usar enchufes inteligentes que permitan controlar el suministro de corriente de dichos artefactos con comandos de voz o toques en la pantalla del teléfono. Con esta medida, además de beneficiar tu bolsillo, estarás contribuyendo a cuidar el medio ambiente y a combatir el cambio climático.