Los portales de internet falsos representan una nueva manera de cometer estafas en el ciberespacio. El objetivo no es otro que apoderarse de información personal que permita a los malhechores ingresar a nuestras cuentas bancarias, cuentas de correo electrónico o cuentas de redes sociales para cometer delitos con fines lucrativos.
Llegar a un portal de Internet falso es muy sencillo. Por lo general somos persuadidos de hacerlo con mensajes de texto o correo electrónico, así como mensajes de WhatsApp o Telegram maliciosos, y en los que se nos hace saber que nos ha llegado a nuestra cuenta bancaria un nuevo depósito de dinero o tenemos un beneficio pendiente de recepción en alguna otra entidad comercial que debemos atender visitando su supuesta página web oficial.
Es por eso que los ciberdelincuentes crean páginas idénticas en contenido a las páginas oficiales, ya que el usuario ingresará con toda confianza sus datos personales, números de tarjetas de crédito y contraseñas, las cuales son capturadas de inmediato, poniendo en estado de vulnerabilidad a las víctimas. Esta manera de cometer estafas es muy frecuente hoy en día, sin embargo, hay varias formas de evitar caer en ellas.
Cómo detectar una página web falsa
Hay ciertos detalles que distinguen a una página web falsa de una página web legítima. En primer lugar se encuentra el diseño de la página. Las páginas web falsas no replican en su totalidad el sitio legítimo, en su lugar, se limitan a ofrecer solamente las secciones que conducen al robo de información. Además, en esta clase de sitios suele encontrarse muchos errores ortográficos e imágenes de baja resolución, entre otras características que no son acordes a una entidad de prestigio.
Por otro lado, también es posible encontrar cambios en la escritura de su dirección web, difiriendo en algunos pocos caracteres de página web legítima. La navegación por su contenido también es distinta, siendo más lenta que en el portal legítimo. Un detalle adicional que también puede llamar a sospechas es la falta de un certificado de seguridad: las páginas fraudulentas no utilizan el protocolo HTTPS, por lo que su dirección web no empieza con las siglas HTTPS y no tiene un candado al costado, algo que es muy fácil de comprobar.
Cómo protegerte de las páginas falsas
Para contrarrestar los ataques de los creadores de páginas falsas es conveniente seguir las siguientes recomendaciones.
Utiliza un navegador web seguro y actualizado. Google Chrome o Firefox, por ejemplo, pueden detectar sitios web no seguros.
Evitar abrir los enlaces incluidos en los mensajes de remitentes que no sean de tu confianza. Y cuando se trate de entidades que solicitan información sensible, opta por escribir manualmente su dirección oficial.
Sospecha de las tiendas virtuales que incitan a la compra de sus productos ofreciendo descuentos excesivamente atractivos, pues puedes caer en la trampa de una compra fraudulenta.
Usa un servicio en línea como Desenmascara.me. Se trata de una herramienta de seguridad en línea que verifica la autenticidad de una página web tomando en cuenta diversos factores como su diseño y contenido, dirección web y certificados de seguridad.
Imagen creada con Luzia desde Telegram